jueves, 29 de diciembre de 2011

¿Tenemos realmente el control?


Este vídeo es el “efecto dominó” más impresionante de la historia. Se llama "El rumbo de las cosas" ("Der lauf der dinge" o "The ways things go") y fue hecho en 1987 por los artistas suizos Peter Fischli y David Weiss.

De acuerdo, no es tan ágil como el famoso videoclip de OKGo! o el anuncio de Honda (que, todo hay que decirlo, acabó en los tribunales por plagiar a la pareja de creadores suizos). Pero es en su lentitud donde está su mérito.

Los choques en cadena se suceden de forma tan pausada que nos contagian de un inquietante suspense. Sabemos que todo saldrá bien, que la rueda chocará contra la tabla, el péndulo golpeará la ficha y se activará el siguiente mecanismo, pero mientras lo vemos no podemos dejar de preguntarnos si todo ese montaje milimétricamente calculado al final funcionará. Porque aquí, como en la vida, por mucho que lo planifiquemos al detalle, siempre hay algo que puede fallar y dar al traste con todo.

El vídeo es una reflexión sobre la creación artística: en él vemos un sinfín de transformaciones provocadas por la gravedad y diferentes reacciones químicas. Todas se producen, aparentemente, de forma automática, sin que medie la intervención humana. Los creadores se preguntan si, tal vez, el arte (y la vida en general) no es sino una simple sucesión de cambios accidentales que no controlamos del todo.

jueves, 22 de diciembre de 2011

Cómo mirar a una mujer. Berthe Morisot en el Museo Thyssen

Berthe Morisot, "El espejo psiqué", 1876
Édouard Manet, "Nana", 1877
Estos dos cuadros son un buen ejemplo del machismo con el que los hombres retrataban a las mujeres en el siglo XIX. Ambos representan lo mismo: una joven arreglándose delante del espejo. Hasta la composición, el estilo y el año en que fueron pintados es parecido. Sin embargo, el de la izquierda es obra de Berthe Morisot, la primera mujer impresionista, mientras que la de la derecha la firma su amigo Édouard Manet, padre del movimiento.

En la pintura de Morisot la chica se viste de forma elgante y con un aire melancólico. Tiene la mirada absorta, como si estuviera meditando. La artista presenta el retrato íntimo de una mujer sensible pero inteligente, que piensa por si misma. Nos muestra, en definitiva, a una joven bella pero independiente.

La visión que da Manet aquí de la mujer no podía ser más diferente. Se trata de una prostituta en ropa interior que se maquilla justo después de haberse acostado con su cliente. Él la observa satisfecho desde la derecha del cuadro. La chica mira alegre e insinuante al espectador, como ofreciéndose a nosotros. Para Manet no hay lugar para retratos íntimos y reflexivos de la mujer: es un objeto de deseo al servicio del placer masculino.

Este enorme contraste tiene una fácil explicación. Además de paisajes, a los impresionistas les encantaba pintar escenas sórdidas de la vida urbana: cabarets, bares, prostíbulos, etc. Todos estos ambientes estaban totalmente prohibidos para una mujer de clase alta como Morisot, así que no le quedó más remedio que dedicarse a retratar espacios hogareños y familiares como el que vemos aquí.

En el siglo XIX las mujeres no podían estudiar en la Academia de Bellas Artes de París. Aún así Berthe Morisot se empeñó en ser artista y logró mostrarnos una imagen revolucionaria de la mujer, libre de los clichés y machismos de su época.

miércoles, 14 de diciembre de 2011

Norman Foster: la belleza de las cosas útiles

Esta semana, la sección de arte de Pablo Ortiz de Zárate en Hoy por Hoy Madrid, Cadena Ser, está dedicada a Norman Foster y su documental "¿Cuánto pesa su edificio, señor Foster?" (ver trailer), editado por Ivory Press y que ya está en DVD. Aquí te explicamos por qué es uno de los arquitectos más improtantes:



Viaducto de Millau (Francia, 2004)
Es el autor del edificio más grande del mundo (la terminal 3 del aeropuerto de Pekín), el más caro en su momento (la torre del banco HSBC en Hong Kong), el puente más alto (el viaducto de Millau en Francia) y el que más connotaciones históricas tiene (la remodelación del Reichstag en Berlín).
Aeropuerto de Pekín (China, 2008)


Cambió la forma de diseñar los aeropuertos para que nos orientemos instintivamente en ellos y las esperas sean más agradables (aeropuerto de Londres-Stansted).

Y ahora está construyendo la primera ciudad del mundo que no contamina (Masdar City, en Abu Dhabi): un Sillicon Valley oriental, para 100.000 personas, en mitad del desierto y donde los coches se conducen sólos.

miércoles, 7 de diciembre de 2011

Los bebés más feos de la historia del arte


¿Quién no ha tenido que aguantarse la risa en un museo al ver uno de estos horribles bebés? La mayoría son imágenes del niño Jesús, pero aunque estemos ante una imagen sagrada, es imposible disimular.

Un blog ha recopilado algunos de los casos más impresionantes de amorfismo y fealdad de recién nacidos en la historia de la pintura antigua. Es para reirse sin parar...

¿Por qué suelen ser tan feos los bebés de los cuadros renacentistas, bizantinos y medievales? ¿Es que los artistas no aprendieron a pintar recién nacidos hasta el siglo XVII? Hay varias teorías que lo explican pero estas dos son las más aceptadas:

1.- Por un lado, los nobles que pagaban el cuadro solían querer verse retratados en él, aunque la escena fuera de la Virgen con el niño. En estos casos, los pintores tenían que representar los rasgos de su cliente en la cara del Jesús recién nacido, la figura más importante. Daba igual que el pequeño tuviera pinta de viejo, lo importante era satisfacer el ego del dueño.

2.- Pero esto, por si sólo, no explica los cuerpos desproporcionados de algunos bebés. Según la teoría más extendida, durante aquellos años los artistas no podían representar a Jesús como un bebé normal y corriente. Era el hijo de Dios y eso se consideraba una herejía. Había que pintarle con rasgos de hombre adulto para que el espectador se diera cuenta de que estaba ante un ser sobrenatural.

Y sin duda lo conseguían: sobrenatural es la mejor palabra para definir algunos de los "ejemplares" que tenemos aquí.

Más en: http://uglyrenaissancebabies.tumblr.com/

martes, 6 de diciembre de 2011

Pedro Almodóvar y las cotorras del Reina Sofía

Hay 5 nuevas estrellas en la colección permanente del Museo Reina Sofía. A una la conocemos todos: Pedro Almodóvar (el vídeo de uno de sus conciertos con Fabio McNamara introduce el arte español de los años 80).

Las otras protagonistas son 4 cotorras vivas que forman parte de la obra "Tropicália" (1967) del artista brasileño Hélio Oiticica. A partir de ahora habitarán en una jaula dentro del edificio Nouvel.



Esta semana en Hoy por Hoy Madrid explicamos éstas y otras curiosidades de la recién inaugurada tercera parte de la colección permanente del Reina Sofía: "De la revuelta a la posmodernidad (1962-1982)". Escúchalo aquí: